lunes, 31 de agosto de 2009

¿Cómo puedo establecer la velocidad lectora en mis alumnos?

Hay varias formas para cuantificar la velocidad lectora de los alumnos: Una forma muy práctica es a través del uso de la guía visual (un lápiz, lapicero, palito chino) que permite establecer, "al ojo", cuáles son los alumnos con menor, regular o mayor velocidad lectora. Es difícil que dos o más alumnos lean exactamente a un mismo ritmo, sin embargo, se puede "notar" cuándo un alumno lee con poca velocidad. Lo bueno es a través de la práctica misma que el alumno puede aumentar notablemente su velocidad lectora, sin mermar el grado de su comprensión, por el contrario, este uso de la guía visual le permite mantener el grado de atención y concentración que, por lo general, empiezan en un buen nivel, y a media página, en el mejor de los casos, desaparecen y el lector empieza a vagar mentalmente, ajeno al texto hasta que se da cuenta de ello y debe volver a leer o, simplemente, dejar de hacerlo.Aquí les dejo unas cuantas fotografías que dan origen a esta entrada.











El uso de la guía visual es de gran ayuda para desarrollar la velocidad lectora y acceder a la comprensión del texto en la medida de que el alumno sepa utlizar otras estrategias de carácter metacognitivos (más información). Por otro lado y volviendo al uso de la guía visual hay decir que es una gran herramienta (¡Qué sería del ser humano sin herramientas!) para iniciar el camino de la lectura, pero que "no siempre se va a depender de esta", va a llegar el momento en que el lector podrá prescindirla o sencillamente decidirá continuar usándola. Ello dependerá de cómo pueda alcanzar eficazmanete la comprensión.



Gracias por leer

Manuel Urbina

Cómo fueron engañados los malos hijos (ANÓNIMO)

Un hombre muy rico, creyendo que estaba a punto de morir, llamó a sus hijos y dividió entre ellos sus propiedades. Sin embargo, no murió, y al levantarse de la cama se encontró con que sus hijos ya no lo querían, ni tenían con él las delicadezas de antes, cuando todos esperaban conseguir mayor parte de su fortuna.
Todos lo trataban mal, y no se recataban para decir que deseaban que muriese lo más pronto posible, ya que su vida sólo originaba gastos y molestias.
El pobre hombre no cesaba de llorar, y un día se encontró con un viejo amigo, a quien contó lo que le ocurría. El amigo, conmovido por lo que acababa de oír, prometió hallar una solución a aquel estado de cosas.
En efecto, la encontró y a los pocos días llegó con gran pompa a la casa de su amigo, seguido de diez criados que eran portadores de unos pesados sacos llenos de piedras.
Cuando estuvieron solos, el amigo dijo:
-Te he traído estas piedras para engañar a tus hijos. Cuando me marche vendrán a ver lo que te he traído. Diles que he venido a pagarte una deuda muy antigua, y que eres más rico que antes. Ya verás cómo todos se desviven por ti. Volveré dentro de algún tiempo para ver cómo van las cosas.
Cuando, transcurridos unos meses, volvió el amigo, encontró al viejo rodeado de sus hijos, que todos a una se desvivían por él. Y así siguieron haciéndolo hasta que murió, descubriendo entonces el engaño, que tenían bien merecido.

FIN

http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/otras/anon/india/como.htm

ACTIVIDADES:
En este cuento, la idea principal gira sobre:

a) La ambición

b) La ingratitud

c) El interés

d) La burla

Escoge la alternativa que tú creas que es la adecuada y explícanos tus razones brevemente.

PAÍSES QUE PROMOCIONAN LA LECTURA






sábado, 29 de agosto de 2009

LA VELOCIDAD LECTORA ES LA BASE PARA LA COMPRENSIÓN DE TEXTOS

Muchos "especialistas" en el tema de la Comprensión Lectora, manifiestan que la velocidad no es importante para realizar los procesos mentales que llevan a la comprensión del texto. Estoy seguro de que ellos solo han leído las partes que pueden comprender en los textos científicos, pues la velocidad y fluidez lectora son temas que no tiene discusión y aparecen en los libros elementales sobre esta materia, pero aducen mil y una razones para convencer sobre algo que ellos jamás han investigado desde la misma práctica, es decir, en la enseñanza de la lectura comprensiva en las aulas, con los alumnos y monitoreando el proceso. Por si alguien cree que estoy loco o lleno de soberbia, aquí les dejo algunas fichas de mi colección.
Manuel Urbina


(...) La velocidad lectora es un indicador del rendimiento escolar muy habitual en el centro educativo. La velocidad con que se lee condiciona la duración de determinadas actividades de aprendizaje. Una baja velocidad lectora dificulta notoriamente el poder seguir una lectura oral colectiva en la clase, retarda la realización de ejercicios y actividades escritas y dificulta, también, otras actividades didácticas. VALLÉS ARANDIGA, Antonio. Velocidad Lectora-1, Editorial Promolibro, Valencia 1999

Cuando un niño es incapaz de leer un pasaje adaptado a su edad con una descodificación precisa, sin esfuerzo, y una palabra tras otra con una expresividad adecuada, uno entiende por qué la fluidez lectora es esquiva y fascinante. Kameenui y Simmons (2001) esbozan una metáfora elocuente afirmando que para muchos maestros , investigadores y niños, la fluidez es el nudo gordiano de la habilidad lectora; su simplicidad y elegancia revelan su complejidad. GONZÁLEZ TRUJILLO, M. Carmen. Comprensión lectora en niños: morfosintaxis y prosodia en acción. Tesis doctoral Universidad de Granada, pág. 72, 2005.



"Un niño que lee con lentitud, se atraca al tratar de reconocer palabras que no conoce; tiene que hacer un esfuerzo adicional por reconocerlas, con lo que se desconcentra y olvida lo que había acumulado en su memoria con su lectura previa. La falta de lectura fluida atenta contra la comprensión de lectura y alude a problemas de vocabulario, percepción fonémica, fonética, o falta de aprestamiento temprano para estimular la capacidad lectora. Por ello, Crouch considera que medir la velocidad de lectura correcta puede ser un buen predictor del desempeño general del alumnado en los otros temas del grado que cursa".
León Trahtemberg

17 de Marzo de 2006 Leer artículo completo en: http://74.125.95.132/search?q=cache:meNbDVbaKAAJ:www.correoperu.com.pe/lima_columnistas.php%3Fid%3D23105%26p%3D6%26ed%3D14+velocidad+lectora+fluidez+leon+trahtemberg&cd=1&hl=es&ct=clnk&gl=es&lr=lang_es|lang_en


a medida que consiguen reconocer palabras con mayor rapidez, por el solo efecto de la rapidez ya se produce un incremento en la comprensión lectora. Esto se debe a que cuanto más rápida y automáticamente se reconocen las palabras, más espacio queda disponible en la memoria a corto plazo para la ejecución de los procesos superiores..." CUETOS VEGA, Fernando. Psicología de la lectura, Editorial Escuela Española, Madrid 1999, pág. 98


El lector rápido y preciso posee un instrumento inapreciable para penetrar en el amplio mundo del conocimiento que yace tras la cubierta de los libros. El lector deficiente lee de manera tan lenta, que no puede procesar directamente el significado. Debe, en consecuencia, depender en gran medida de lo que aprende por medio del escuchar; motivo por el cual tiende a fracasar en las materias que requieren de la lectura. Este fracaso es mayor a medida que el alumno pasa de curso y que , por ende, aumenta la necesidad de la lectura en el proceso de adquisición de conocimientos". CONDEMARÍN, Mabel; ALLENDE, Felipe. La lectura: teoría, evaluación y desarrollo, pág. 7, Editorial Andres Bello, 1993, chile.


"En el proceso lector, juegan un papel importantísimo la velocidad y la comprensión lectora. La velocidad depende de unos hábitos que potencian aspectos fisíológicos que actúan, mientras que la comprensión implica: capacidad mental suficiente, sincresis (análisis-síntesis), disposición activa para captar significados o ideas y una riqueza de vocabulario que permita una cierta independencia con respecto al diccionario. La rapidez o velocidad de la lectura se mide en función del numero de palabras que un sujeto es capaz de leer durante un minuto". J. CUEVAS, L. GORDILLO, M. MARTÍ. Didáctica de la lectura, métodos y diagnóstico, Editorial Humanitas, Barcelona 1985, pág. 135

LA VENTANA ABIERTA (Saki)


Síntesis:Un tipo que buscaba un lugar de descanso, llega a una casa en pleno bosque y es testigo de la aparición de unos fantasmas...
¡Qué esperas, a leerrrrrrrrrrrrrrr!
PD: el autor de este cuento también escribió SREDNI VASHTAR que tú ya conoces.


LA VENTANA ABIERTA

-Mi tía bajará enseguida, señor Nuttel -dijo con mucho aplomo una señorita de quince años-; mientras tanto debe hacer lo posible por soportarme.
Framton Nuttel se esforzó por decir algo que halagara debidamente a la sobrina sin dejar de tomar debidamente en cuenta a la tía que estaba por llegar. Dudó más que nunca que esta serie de visitas formales a personas totalmente desconocidas fueran de alguna utilidad para la cura de reposo que se había propuesto.

-Sé lo que ocurrirá -le había dicho su hermana cuando se disponía a emigrar a este retiro rural-: te encerrarás no bien llegues y no hablarás con nadie y tus nervios estarán peor que nunca debido a la depresión. Por eso te daré cartas de presentación para todas las personas que conocí allá. Algunas, por lo que recuerdo, eran bastante simpáticas.

Framton se preguntó si la señora Sappleton, la dama a quien había entregado una de las cartas de presentación, podía ser clasificada entre las simpáticas.

-¿Conoce a muchas personas aquí? -preguntó la sobrina, cuando consideró que ya había habido entre ellos suficiente comunicación silenciosa.

-Casi nadie -dijo Framton-. Mi hermana estuvo aquí, en la rectoría, hace unos cuatro años, y me dio cartas de presentación para algunas personas del lugar.

Hizo esta última declaración en un tono que denotaba claramente un sentimiento de pesar.

-Entonces no sabe prácticamente nada acerca de mi tía -prosiguió la aplomada señorita.

-Sólo su nombre y su dirección -admitió el visitante. Se preguntaba si la señora Sappleton estaría casada o sería viuda. Algo indefinido en el ambiente sugería la presencia masculina.

-Su gran tragedia ocurrió hace tres años -dijo la niña-; es decir, después que se fue su hermana.

-¿Su tragedia? -preguntó Framton; en esta apacible campiña las tragedias parecían algo fuera de lugar.

-Usted se preguntará por qué dejamos esa ventana abierta de par en par en una tarde de octubre -dijo la sobrina señalando una gran ventana que daba al jardín.

-Hace bastante calor para esta época del año -dijo Framton- pero ¿qué relación tiene esa ventana con la tragedia?

-Por esa ventana, hace exactamente tres años, su marido y sus dos hermanos menores salieron a cazar por el día. Nunca regresaron. Al atravesar el páramo para llegar al terreno donde solían cazar quedaron atrapados en una ciénaga traicionera. Ocurrió durante ese verano terriblemente lluvioso, sabe, y los terrenos que antes eran firmes de pronto cedían sin que hubiera manera de preverlo. Nunca encontraron sus cuerpos. Eso fue lo peor de todo.

A esta altura del relato la voz de la niña perdió ese tono seguro y se volvió vacilantemente humana.

-Mi pobre tía sigue creyendo que volverán algún día, ellos y el pequeño spaniel que los acompañaba, y que entrarán por la ventana como solían hacerlo. Por tal razón la ventana queda abierta hasta que ya es de noche. Mi pobre y querida tía, cuántas veces me habrá contado cómo salieron, su marido con el impermeable blanco en el brazo, y Ronnie, su hermano menor, cantando como de costumbre "¿Bertie, por qué saltas?", porque sabía que esa canción la irritaba especialmente. Sabe usted, a veces, en tardes tranquilas como las de hoy, tengo la sensación de que todos ellos volverán a entrar por la ventana...

La niña se estremeció. Fue un alivio para Framton cuando la tía irrumpió en el cuarto pidiendo mil disculpas por haberlo hecho esperar tanto.

-Espero que Vera haya sabido entretenerlo -dijo.

-Me ha contado cosas muy interesantes -respondió Framton.

-Espero que no le moleste la ventana abierta -dijo la señora Sappleton con animación-; mi marido y mis hermanos están cazando y volverán aquí directamente, y siempre suelen entrar por la ventana. No quiero pensar en el estado en que dejarán mis pobres alfombras después de haber andado cazando por la ciénaga. Tan típico de ustedes los hombres ¿no es verdad?

Siguió parloteando alegremente acerca de la caza y de que ya no abundan las aves, y acerca de las perspectivas que había de cazar patos en invierno. Para Framton, todo eso resultaba sencillamente horrible. Hizo un esfuerzo desesperado, pero sólo a medias exitoso, de desviar la conversación a un tema menos repulsivo; se daba cuenta de que su anfitriona no le otorgaba su entera atención, y su mirada se extraviaba constantemente en dirección a la ventana abierta y al jardín. Era por cierto una infortunada coincidencia venir de visita el día del trágico aniversario.

-Los médicos han estado de acuerdo en ordenarme completo reposo. Me han prohibido toda clase de agitación mental y de ejercicios físicos violentos -anunció Framton, que abrigaba la ilusión bastante difundida de suponer que personas totalmente desconocidas y relaciones casuales estaban ávidas de conocer los más íntimos detalles de nuestras dolencias y enfermedades, su causa y su remedio-. Con respecto a la dieta no se ponen de acuerdo.

-¿No? -dijo la señora Sappleton ahogando un bostezo a último momento. Súbitamente su expresión revelaba la atención más viva... pero no estaba dirigida a lo que Framton estaba diciendo.

-¡Por fin llegan! -exclamó-. Justo a tiempo para el té, y parece que se hubieran embarrado hasta los ojos, ¿no es verdad?

Framton se estremeció levemente y se volvió hacia la sobrina con una mirada que intentaba comunicar su compasiva comprensión. La niña tenía puesta la mirada en la ventana abierta y sus ojos brillaban de horror. Presa de un terror desconocido que helaba sus venas, Framton se volvió en su asiento y miró en la misma dirección.

En el oscuro crepúsculo tres figuras atravesaban el jardín y avanzaban hacia la ventana; cada una llevaba bajo el brazo una escopeta y una de ellas soportaba la carga adicional de un abrigo blanco puesto sobre los hombros. Los seguía un fatigado spaniel de color pardo. Silenciosamente se acercaron a la casa, y luego se oyó una voz joven y ronca que cantaba: "¿Dime, Bertie, por qué saltas?"

Framton agarró deprisa su bastón y su sombrero; la puerta de entrada, el sendero de grava y el portón, fueron etapas apenas percibidas de su intempestiva retirada. Un ciclista que iba por el camino tuvo que hacerse a un lado para evitar un choque inminente.

-Aquí estamos, querida -dijo el portador del impermeable blanco entrando por la ventana-: bastante embarrados, pero casi secos. ¿Quién era ese hombre que salió de golpe no bien aparecimos?

-Un hombre rarísimo, un tal señor Nuttel -dijo la señora Sappleton-; no hablaba de otra cosa que de sus enfermedades, y se fue disparado sin despedirse ni pedir disculpas al llegar ustedes. Cualquiera diría que había visto un fantasma.

-Supongo que ha sido a causa del perro -dijo tranquilamente la sobrina-; me contó que los perros le producen horror. Una vez lo persiguió una jauría de perros parias hasta un cementerio cerca del Ganges, y tuvo que pasar la noche en una tumba recién cavada, con esas bestias que gruñían y mostraban los colmillos y echaban espuma encima de él. Así cualquiera se vuelve pusilánime.

La fantasía sin previo aviso era su especialidad.

FIN


Actividades: Responde las preguntas en tu cuaderno de C.L

1. ¿Cuál era la razón principal por la cual señor Nuttel había decidido hospedarse en aquella casa de campo?

2. ¿Por qué aquella enorme ventana siempre se encontraba abierta hasta tarde?

3. ¿Qué era lo que más le preocupaba a la señora Sappleton?

4. Según la sobrina ¿de qué manera habían perecido (muerto) la familia de la señora Sappleton?

5. Desde tu punto de vista como lector, ¿cuál es la parte del cuento que no tendría sentido o no sería creíble? Explícalo brevemente.

6. Escribe en cuatro líneas como mínimo lo que sentíste (tus emociones) al leer este cuento?

OPCIONAL

¿Quieres ver el cortometraje inspirado en este cuento? A pesar de que está en inglés podrás disfrutarlo porque tú ya conoces los diálogos. Haz click aquí

viernes, 28 de agosto de 2009

Los alumnos se organizan para representar "La gallina degollada" de Horacio Quiroga



Buscamos que los alumnos desarrollen su competencia lectora, es decir, que lleguen a tener la capacidad para poder leer comprensivamente cualquier tipo de texto y con la misma naturalidad con la aceptan ir al cine, conversar con un amigo, o ir a una fiesta.
Para ello es necesario tener un programa de enseñanza que permita al alumno empezar desde los niveles más básicos que involucra la decodificación y desarrollo de la velocidad y fluidez lectoras hasta llegar a la enseñanza de estrategias cognitivas y metacognitivas.
La tarea no es fácil, pero tampoco es imposible si es que se cuentan con los medios esenciales para llevar a cabo este plan. En el Colegio Inca Garcilaso de la Vega contamos con el apoyo total por parte de los directivos lo cual nos permite realizar actividades de animación lectora, seleccionar los libros adecuados, realizar lecturas fuera del aula, dramatizar, préstamos de textos, bibliotecas, etc.
Queremos que los alumnos amen la lectura y asuman una actitud diferente hacia ella. Deseamos alumnos lectores y ello implica ser reflexivos, analíticos, críticos y con personalidad propia.
Las fotos que estamos publicando corresponden a la representación del cuento "La gallina degollada", en donde se puede ver cómo los chicos se organizan, planifican y llevan a cabo la obra. Es cierto que se dan muchas limitaciones, pero lo más importante es ver cómo a través de sus propios libretos muestran los diferentes niveles de comprensión: literal, inferencial, valorativo, crítico.

Si más escolares comprenden lo que leen el PBI crecería 1%

Por: Iana Málaga Newton

Aunque el Estado Peruano invierte menos del 3% de su PBI en educación, mejorar el nivel educativo de la población asegura un impacto a largo plazo en el crecimiento económico. Gustavo Yamada, profesor de la Universidad del Pacífico, explica que —según un estudio del Banco Mundial— si el Perú lograra incrementar en 47 puntos el resultado obtenido en la prueba PISA del año 2000, su PBI crecería 1% de forma sostenida.

Como se recuerda, hace nueve años el Perú fue estudiado por el Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes (PISA), que midió las destrezas verbales y matemáticas de alumnos de 15 años en distintos colegios públicos y privados. Este año el Perú volvió a participar en esta evaluación, por lo que el miércoles pasado 7.000 alumnos de 250 colegios rindieron la prueba. Claro que ahora se espera obtener mejores resultados que el 2000, año en que el Perú quedó en el último puesto de 41 países evaluados.

Hugo Díaz, vicepresidente del Consejo Nacional de Educación (CNE), precisa que ese año obtuvimos 327 puntos en la prueba PISA (de un puntaje máximo de 625), lo que significó que dos tercios de los alumnos evaluados no estaban en capacidad de leer y comprender los textos más elementales.

Sin embargo, si el Perú logra ahora conseguir 47 puntos adicionales al resultado de PISA del año 2000, Díaz afirma que esto generaría que dos tercios de los alumnos evaluados sí puedan comprender lo que leen.

Esta mejora —agrega Yamada— permitiría que los ingresos económicos de toda la población se incrementen en 30% en un lapso de 20 años, lo que supondría 1% en el PBI. “También crecería la productividad de los operarios en las empresas de todos los sectores y el personal de mayores rangos tendría una mayor capacidad para desarrollar investigaciones y producir innovaciones tecnológicas”, asevera.

Eso sucedió en países como Corea, Taiwán, Finlandia y la India. “A mediados de los años 60, estos países tenían los mismos niveles de educación que el Perú, hasta que decidieron mejorar la calidad de sus escuelas y universidades”, puntualiza Díaz.

Evidentemente, los expertos señalan que mejorar la calidad de la educación no produce retornos en el corto plazo, por lo que se deberían diseñar políticas más adecuadas para medir los impactos que este cambio genera sobre el capital humano.


Texto completo en: http://www.elcomercio.com.pe/noticia/331476/si-mas-escolares-comprenden-lo-que-leen-pbi-creceria_1